Este estudio integró modelos numéricos con alta resolución espacial.
Un estudio de la Universidad de Aveiro (UA) que integró modelos numéricos de alta resolución espacial, adaptados a cada lugar, concluye que el nivel del agua «subirá, pero sin catastrofismo».
Según ese estudio, en el estuario del Tajo, en el año 2055, 10,9 kilómetros cuadrados de áreas urbanas se inundarán por el efecto combinado de la marea, la subida del nivel medio del mar y como consecuencia de fenómenos meteorológicos extremos, que pueden ocurrir una vez cada 100 años.
Para 2100, esa cifra será de 14,9 kilómetros cuadrados, y los investigadores predicen que alrededor de 66 kilómetros cuadrados de áreas agrícolas y de pastoreo se inundarán para 2055.
Se estima que más de 6500 personas podrían verse afectadas por la crecida del estuario del Tajo en 2055. En 2100 el número de afectados superará los 12500.
Asimismo, en cuanto a las áreas urbanas, en la Ría de Aveiro habrá 6,4 kilómetros cuadrados de área inundada en 2055 y ocho en 2100, en la desembocadura del Mondego 1,4 en 2055 y 1,7 en 2100 en el estuario do Sado 5,6 en 2055 y 6,7 para 2100 y en Ria Formosa 3,6 kilómetros cuadrados en 2055 y 4,4 para 2100.
“Los números no son alarmantes, a pesar de todos los daños resultantes de la pérdida de territorio”, considera João Miguel Dias, de la Universidad de Aveiro.